Es originario de los Balcanes, siendo muy cultivado como árbol de sombra.
Principios activos:
Corteza: aesculina, fraxina, tanino. Pericarpio: Saponina, pectina, potasio, calcio, fósforo, aceite etéreo.
Semillas: Catequina, flavonoides, saponinas triterpénicas: aescina.
Indicaciones: Fragilidad capilar, varices, hemorroides sangrantes, tromboflebitis, epistaxis, equímosis, metrorragias. Hemostático.
Contraindicaciones: embarazo.
Precauciones / intoxicación: A dosis terapéuticas no es tóxica. Las semillas, al ser confundidas con las del castaño pueden ocasionar gastroenteritis, midriasis y somnolencia.
Formas galénicas / posología: Uso interno: Decocción: 30 a 50 gr de corteza / litro. Uno o dos vasos al dia o baños de asiento evitando la gastritis. Extracto fluido estabilizado: 10 gotas 3 veces al día.
Elixir floral: El cuadro psíquico que remedia este elixir que pertenece a las flores de Bach es aquel que se caracteriza por pensamientos parásitos y torturantes. Un estado mental de disco rayado, como lo denomina Bach. Es para cuando una persona tiene un exceso de información mental y se abruma por ello, siendo por tanto, un excelente remedio en caso de insomnio por exceso de preocupación. Corrige la excesiva expansión del cuerpo mental. Es curioso ver cómo su brote funciona en defecto de lo mental, mientras la flor desarrollada actúa en el exceso de mental. Alinea los cuerpos mental, astral y emocional. Actúa sobre el segundo y el tercer chacra. Es muy útil en neurosis obsesivas y en ciertas situaciones maníacas.
