ROSAL SILVESTRE. ROSA CANINA. ESCARAMUJO.
Hay muchas estirpes de rosales silvestres en toda la península y Europa. A veces
sobre las ramas de este rosal se forman unas masas redondeadas, esponjosas, como una pelota de musgo, de color verde amarillento o rojizas, que son producidas por la picadura de un insecto. Cortándolas, en su parte central se observa un núcleo relativamente pequeño, duro, dentro del cual se desarrollan las larvas del insecto Rhodites rosae, y la masa redondeada, en su conjunto, es el bedegar. De esta planta se utilizan raíces, hojas, pétalos, frutos o escaramujos, los fructículos internos con su semilla, y los bedegares.
escaramujo, tapaculos. |
Acción farmacológica: Escaramujos (vulgarmente tapaculos dados sus efectos): por los taninos presentan acción astringente, antidiarréica. Los flavonoides determinan acción diurética y vitamínica P: protector capilar y venotónico. Las flores le confieren acción suavemente laxante y tónica general. Las hojas son tonificantes y cicatrizantes en uso externo.
Indicaciones: Diarrea, fragilidad capilar, edemas, varices, obesidad, cistitis, urolitiasis, convalecencia, astenia primaveral, heridas. En el Renacimiento a los rosales se les atribuyeron múltiples facultades curativas. El agua de rosas se considera oftálmica, en especial, la obtenida con pétalos de rosas blancas. El escaramujo es antiescorbútico por la cantidad de vitamina C que posee. El bedegar se toma en infusión como tónico y diurético.
Elixir floral: (Wild rose). Para la resignación y la apatía, para quienes no hacen ningún esfuerzo por mejorar las cosas. Para los que no sienten una recuperación de su enfermedad, tras larga convalecencia. Aporta paz frente a la muerte cercana. Puede ayudar a tratar la teleadicción.