jueves, 7 de febrero de 2013

Alfalfa





Alfalfa.

Proviene de Asia y Africa del Norte. Los árabes la bautizaron "al-facfacah" que significa "madre de todos los alimentos". La usaban para fortalecer el cabello. Se utilizan partes aéreas. Es una de las fuentes de minerales más ricas en su raíz que absorbe nutrientes difícilmente accesibles a la mayoría de las plantas. 

Principios activos: Saponósidos, taninos, sales minerales (10%): calcio, hierro, fósforo, potasio, cobre, cinc, selenio; isoflavonas: genisteína, biocanina A; abundantes vitaminas (todas las conocidas): C (400 mg por 100 g de hojas secas), carotenos (6-7 mg %), vitaminas K (esencial en la síntesis de los factores de coagulación), D y E; cumestrol (estrógeno vegetal). Trazas de alcaloides (en las semillas): estaquidrina, homoestaquidrina.

Acción farmacológica: Hemostático: por la vitamina K. Estrogénica: por las isoflavonas y el cumestrol. Antianémico. Hipocolesterole-miante. Vitamínico. Diurética con acción hipolipemiante. Estimulante general y por sus efectos remineralizantes mejora los problemas de uñas frágiles y cabellos apagados, abiertos y quebradizos.

Indicaciones: Anemias por deficiencias en minerales y vitaminas. Hemorragias: capilares, nasales, gástricas, uterinas, funcionales. Hemorroides. Trombocitopenia. Anemias.

Efectos secundarios: Vademécum avisa de la relación de su uso con la reactivación del Lupus eritematoso sistémico, y con la pancitopenia.